¿Qué tengo que hacer? ¿Quién soy? ¿Quién es él? ¿Quién es él para mí? ¿Quién soy yo para él?... Tantas preguntas, y muy pocas respuestas. Confunde esta situación en la que no puedo saber que pensar ni suponer, en la que la otra persona muchas veces es un completo extraño para mi, en la que sus actitudes pasan de ser lo menos significativo a lo mas importante. Cansada de buscar en los lugares incorrectos y de tener a la palabra "enamorarse" como enemiga y lo ultimo que quiero que me pase. Es detestable que no lo pueda ocultar ni tampoco evitar. Creo que de tantas veces que falle ya no me quedan ganas de intentar, ni de tampoco animarme a algo nuevo, a ALGUIEN nuevo.
La palabra "confusión" es la primera en mi diccionario, la que le sigue es el nombre de él. Ninguna de las dos se llevan muy bien pero son las únicas, que juntas, ocupan tanto espacio en mi cabeza. Estas ganas de nada menos de ti, estas ganas de tenerte a mi lado y dejar de esperar.
Wrote by: Let there be love.
La palabra "confusión" es la primera en mi diccionario, la que le sigue es el nombre de él. Ninguna de las dos se llevan muy bien pero son las únicas, que juntas, ocupan tanto espacio en mi cabeza. Estas ganas de nada menos de ti, estas ganas de tenerte a mi lado y dejar de esperar.
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- Te molesta si fumo?- pregunte solo por cortesía, ya que estaba sacando la cajetilla
- sí, bastante- dijo algo irritado, mientras se tomaba la cara entre las manos - que lastima- mencione entre risas, tratando de tirar el humo a donde no estaba el
- no entiendo, porque aun tienes ese maldito y estúpido vicio de fumar
- Porque a diferencia de ti, el cigarrillo ha sentido caer mis lagrimas en él, porque cuando veo el humo del cigarrillo se que todo está bien y simplemente porque sé que ellos jamás me cambiaran por otra persona, a diferencia de ti...mis cigarrillos me acompañaran hasta la muerte...
Yo me enamore de la persona detrás de ese antifaz, de ese hombre que seca mis lágrimas antes de que se derramen en mi copa de vino… El que hace aparecer las estrellas y la luna, de aquel hombre que besa mi frente y que dice que me quiere a mí, y a nadie más. Me enamore de la persona detrás de ese antifaz…el mismo que tomo mi cara entre sus manos y me susurro “no dejes de soñar…”

¿Qué es lo que quieres de mi?
Sé que yo nunca tengo planes y que siempre eres tú quien me llama. Sé que nunca te he invitado al cine y que no suelo llevarte a cenar. También sé que últimamente no te cuento nada ni te doy conversación fácilmente. No te digo que te quiero, ni te abrazo, ni te beso. Lo siento. Nunca somos lo que los demás esperan de nosotros. Aunque quizá este final sí que era de esperar...